Los manglares son una formación vegetal leñosa, densa, arbórea o arbustiva con máximo 30 metros de altura, compuesta de una o varias especies de mangle y con poca presencia de especies herbáceas y enredaderas.
Sin la protección natural que ofrecen los bosques de mangles, 18 millones más de personas sufrirían cada año los impactos de las inundaciones. Solo Vietnam, China, Filipinas, Estados Unidos y México ahorran 57,000 millones de dólares en daños a la propiedad gracias a los manglares que tienen en sus territorios. Aunque los manglares son complementarios a otras estrategias de reducción de riesgo costero como sistemas de alerta temprana, planificación para que las viviendas no se ubiquen en zonas de alto riesgo, entre otras medidas; y aunque su capacidad de protección también esté limitada por factores como la velocidad de los vientos o la altura del tsunami, estos ecosistemas resultan clave a la hora de definir estrategias para defender las costas, cuidar a las personas que las habitan y construir mayor resiliencia ante los desastres.
En México predominan cuatro especies de mangle (Rhizophora mangle, Laguncularia racemosa, Avicennia germinans y Conocarpus erectus). Aunque existen dos especies más (Avicennia bicolor y Rhizophora harrisonii) con una distribución restringida en el estado de Chiapas y una variedad de (C. erectus var. sericeus). Estas especies se pueden encontrar formando asociaciones vegetales o en bosques monoespecíficos.
Los bosques de manglar forman asociaciones con otras especies, como en el caso de los manglares de Sontecomapan: ahí podemos encontrar una gran diversidad de orquídeas, bromelias y helechos que interactúan en armonía con el paisaje. En cuanto a la fauna asociada, hay una gran cantidad de especies, entre ellas el cocodrilo de Morelet, boas, mapaches, pericos, garzas, osos hormigueros, y una gran diversidad de mariposas, sólo por mencionar algunos, constituyendo así ambientes altamente diversos. Son altamente productivos, sus raíces son un excelente sitio de anidación para peces, crustáceos y moluscos en tanto que las ramas son usadas por aves residentes y migratorias, como un hábitat ideal para refugiarse y cuidado de sus crías.
コメント